Mantequilla Cadí
La mantequilla Cadí es uno de los productos más emblemáticos que produce la Cooperativa Cadí en la Seu d’Urgell (LLeida), fundada por Josep Zulueta en el año 1915. Este producto está muy asociado al Pirineo Catalán, a los productos frescos y naturales que ofrece la vida en la montaña, cuyo perfil vemos representado en color azul y de una forma sencilla, con lo que parecen ser algunos picos nevados. El mensaje es claro: “Llévate a tu nevera un pedacito de lo que la montaña nos ofrece”. El principal valor de marca que transmite este pack es autenticidad.
LO QUE NOS GUSTA
El diseño gráfico de este pack refleja en su composición la sencillez del ámbito rural. El azul transmite sensación del frío, de la frescura propia de los pastos donde nos imaginamos pastando al ganado. El fondo amarillo recuerda el propio color de la mantequilla, pero también la luz intensa del sol en la montaña. Finalmente, el logotipo aparece centrado, dominando la composición, captando toda la atención del consumidor y flanqueado por dos gruesas líneas blancas que envuelven todo el pack y dan soporte a todos los distintivos y sellos de calidad. Aunque no podemos decir que se trate de una puesta en escena brillante, todo parece estar colocado en su sitio y la palabra perfecta para definir esta creatividad sería equilibrio.
- Este pack presenta información complementaria en cinco idiomas, manteniendo en todo momento coherencia y orden en la ubicación de los textos: catalán, castellano, francés, portugués e inglés, que aparecen siempre en este orden.
- Dentro del pack, el bloque de mantequilla viene cubierto por un envoltorio que reproduce la misma creatividad y con papel de aluminio en su cara interior. De esta forma la presentación del producto se mantiene siempre igual, desde el punto de venta donde el cartón se mantiene libre de manchas de grasa, hasta la nevera de los consumidores: una vez que hemos abierto el pack y consumido una parte del producto, la percepción sigue siendo la misma ya que seguimos viendo la caja perfecta en lugar de un paquete deforme con el envoltorio arrugado como sucede con otras marcas de la mantequilla. Este detalle posiciona al producto como “premium” y crea una experiencia y un ritual de consumo más sofisticados.
- Por último, la elección del cartón intensifica la percepción de este producto como natural, orgánico y más saludable. Frente al formato de plástico utilizado por la mayoría de los fabricantes, este pack refuerza la idea de que estamos ante un producto más exclusivo y de una cuidada elaboración.
ALGUNAS SUGERENCIAS
- En un mundo donde los consumidores están cada vez más preocupados por los valores nutricionales de los productos alimenticios, en la mantequilla Cadí echamos en falta esta información. Lo más habitual es incluir esta información en el exterior del pack para que el consumidor pueda comparar entre todos los productos del supermercado los distintos valores. Como alternativa, podrían incluirse los detalles nutricionales, composición, advertencias sobre intolerancias, etc. en el envoltorio interior. También podría incluirse una tarjeta en el interior del pack que serviría además para trasladar al interior algunos de los muchos sellos de calidad que vemos en el exterior. Otra alternativa sería imprimir esta información en la cara interior del pack de modo que, si el consumidor está interesado, pueda desmontarlo y satisfacer su curiosidad.
- Menos es más, especialmente cuando hablamos de uno mismo. El pack muestra cuatro sellos de calidad diferentes en un espacio muy pequeño. Bajo nuestro punto de vista, los unos canibalizan a los otros, es difícil establecer una jerarquía entre ellos y el consumidor acaba rendido ante tal ruido visual, aceptando que se trata de un producto de calidad, pero sin entender por qué lo es. Las marcas obtienen mayores beneficios cuando además de informar, forman a sus clientes. De este modo los clientes se convierten en embajadores de marca que comprenden más en profundidad los productos que consumen y son capaces de transmitir en sus círculos sociales las ventajas y valores. Tal como se muestran los sellos de calidad en este pack, parecen una colección de medallas dispuestas a impresionar al público, en vez de aportar argumentos positivos de compra para el consumidor. Nuestro consejo sería jerarquizar los distintivos y redistribuirlos para que cada uno ocupe un lugar especial en la línea de comunicación, de manera que el consumidor pueda llegar a comprender su importancia y su significado.
- ¡Alerta, se nos ha colado un gnomo! ¿Formará el lechero o lechera parte de la colección de sellos de la que hablábamos anteriormente? Parece más bien una maleta perdida dando vueltas en una cinta de aeropuerto. Metáforas aparte, desde el principio tuvimos la sensación de que esta ilustración de estilo bastante retro era una especie de recuerdo del pasado, de lo que fué algún día la imagen de la compañía. Así que buscando en internet… ¡BINGO! confirmamos que forma parte del branding original de la cooperativa. Así que algún nostáglico tomó la decisión de mantener esta ilustración en el pack actual. Para nosotros, esta persona más que un nostálgico ¡es un visionario! Nos encanta esta adorable figura y creemos que debería tener mucho más si no todo el protagonismo en la composición. Tal y como está ahora, sólo es una mancha tímida y vergonzosa, pero dándole mayor protagonismo podría ser el abanderado de los valores de producto natural, tradicional, de elaboración artesanal, que respeta las materias primas, etc.
MÁS ALLÁ DEL PACK
Revisando la familia de productos de la Cooperativa Cadí, hemos comprobado como en todos ellos se utiliza siempre la versión del logotipo que incluye un marco azul alrededor. Por ello nos parece incoherente utilizar en la cara principal de este pack una versión diferente sin su línea alderedor. Esto afecta a la consistencia de la marca, convirtiéndo la versión principal del logotipo tan sólo en una palabra, “CADÍ”. En general, en términos de construcción de marca, creeamos que la cooperativa tiene un largo camino por recorrer para poner en orden sus productos y unificarlos, presentándolos bajo una misma identidad sólida y competitiva, más que como un cajón desastre donde conviven productos aislados que poco comparten entre sí excepto su origen.
MATERIAL: cartoncillo estucado con reverso blanco
SUPERFICIE: mate
IMPRESIÓN: offset
ACABADOS: –
FABRICANTE: DESCONOCIDO